El punto de partida es la IDEA, y se ralizará un primer análisis para saber el nivel de desarrollo de la misma.
A continuación, y siempre y cuando estén trabajados unos mínimos, de la idea se pasa a una fase de análisis y/o planificación en el que se definen el mercado, los clientes, el nivel de inversión requerido, los gastos a afrontar y otra información necesaria. Se dará por terminado este proceso con el PLAN DE EMPRESA.
Llega un momento decisivo, una vez trabajado el plan de empresa, CREAR o no la empresa y para ello, se pone a disposición de la persona emprendedora información sobre formas jurídicas, opciones de financiación y ayudas.
Si la persona emprendedora decide seguir adelante con la creación de la empresa, se puede decir que ha pasado a la fase de CONSOLIDACION. En la misma, y durante 3 años, recibirá acompañamiento, ¿pero en que consiste este acompañamiento? Se le resolverán dudas propias del negocio, se le facilitarán recursos y en todo momento se buscará la supervivencia de la empresa.